Las calabazas son nativas de América. Muchas culturas antiguas ya lo usaban para alimentar y tratar diferentes enfermedades. En América del Sur, se considera que su uso por parte de las culturas aztecas data de 1300 a 1500 ce. Si desea aprovechar sus nutrientes, presta mucha atención a este artículo.
LUCHA CONTRA EL CÁNCER
Según la investigación, las semillas de calabaza tienen propiedades anticancerígenas. En otras palabras, este alimento puede combatir más eficazmente las células cancerosas. Además de eso, tienen propiedades inflamatorias muy útiles. Otro estudio realizado en Alemania mostró que las mujeres que pasan por la menopausia deben consumir estas semillas a diario. Con eso sería un 23% menos de probabilidades de desarrollar cáncer.
PREVIENE EL INSOMNIO
Esta comida es una rica fuente de triptófano, que se usa para tratar el insomnio crónico. Esto se debe a que el cuerpo convierte la sustancia en melatonina, también conocida como hormona del sueño. Descansa cómodamente, sin estrés, solo consumiendo este remedio.
Un estudio publicado en Neuroscience Nutrition dice que comer la semilla de calabaza, una rica fuente de carbohidratos, era igual de potente en el farmacéutico de triptófano para el tratamiento del insomnio. Simplemente coma algunas semillas antes de acostarse junto con una pequeña cantidad de carbohidratos. Podemos elegir una fruta y comerla con esta semilla.
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